Autobiografía académica

     Yoslainer Penélope Ledezma Rodríguez, nací en Caracas un martes del 10 de mayo de 1983, a las 6am en la Maternidad Concepción Palacios, hija de Teresa Rodríguez, docente del área de Deporte, y Directora de una institución educativa del país y de Pedro Ledezma vendedor empedernido. Soy la 2da hija bajo esa unión, mi hermana mayor Lourdes y yo.Mis padres se separaron cuando era muy niña, y mi madre decidió rehacer su vida y bajo esa relación nacieron mis dos (2) hermanas menores Bexi y Wendymar. Y por otra parte mi padre tomó la misma decisión y de esa relación nació un (1) hermano, Antony; entonces tengo 3 hermanas y un hermano. 

    Desde mi niñez fui mayormente conocida por mi segundo nombre en vista de lo complicado del nombre de pila, llegando incluso a decir aberraciones léxicas que siempre me causan gracia. Fui criada bajo la figura de mi abuela materna, -mi tata-, quien era una persona extremadamente estructurada, la cual se encargó de mis cuidados mientras cursaba mi educación básica; participe en el coro de la institución, y en las tardes me alternaba entre las clases de piano y las prácticas de gimnasia rítmica y artística, actividades que contribuyeron a formar mi disciplina, responsabilidad y compromiso. Mi paso por la educación básica fue provechoso, disfruté cada etapa.

    Al ingresar al bachillerato, fue un poco más complejo, en vista de que no era una estudiante normal, era la hija de la profesora de educación física, por tanto, me costaba socializar de forma fluida ya que existía el distintivo -allí va la hija de la profe-, cosa que decían las niñas, y de los chicos era peor, porque solo buscaban mi “amistad”, para escuchar cosas como: -epa… dile a tu mami que nos preste un balón para jugar en el recreo-. ¡Esa era de alguna forma las desventajas, pero naaaa! Eran mejor las ventajas… como mi mamá se la pasaba en planificación, reuniones, calificaciones, y actividades propias de su profesión, me tocaba acompañarla, los profesores me explicaban de más, existía eso de “plus” en la formación la cual supe aprovechar.

    Como todo bachillerato; esa experiencia deja marcas en el ser, allí tuve dos (2) profesores que infundieron en lo que es mi pasión hoy día.

    Uno de ellos fue mi profesor de matemáticas, Carlos Chivico, quien manejaba una gran reputación -por ser el único que daba la materia de octavo grado-, por raspar a Raquel y todo aquel; por lo que impulsó que me esforzara el triple por el hecho de que tenía el “peso”, de la reputación de la Profesora Teresa.

    Lo que empezó en un terror a operaciones de producto notable, ecuaciones y fórmulas, terminó en amar a Rufinni, proporciones y tendencias.

    Ya finalizando la etapa media básica tuve la dicha de conocer a la Prof. Trina Leiva, mujer morena, elegante e imponente; persona quien me inspiró a amar a la contabilidad en todas sus formas, me mostró de una manera muy sutil pero contundente toda la utilidad que dicho conocimiento y de su uso como se proyectaría en el tiempo.

El liceo tenía la particularidad de graduar en cuatro (4) ramas distintas. Te podías graduar como bachiller en Ciencias, en Humanidades, en Mercantil y en Turismo, por tanto, cuando se me presentó la oportunidad de decidir bajo que rama quería graduarme; ni dudé por un minuto, y tome la decisión de estudiar Mercantil, ya que sabía que la profesora Trina sería mi mentor. 

    Durante mi paso por bachillerato tuve 2 hitos muy importantes, a los 14 años, terminando mi 3er año de bachillerato, quedé embarazada, de mi hija mayor Verónica Slainer, y a los 17 años, mi segunda hija Karina Betzabeth. Mis dos pilares fundamentales que transformaron 180° en mi manera de ver el mundo, ya que tuve que tomar responsabilidades a muy temprana edad, sumado a la complejidad de la sociedad del momento, ya que el ser menor de edad con hijos representaba un tabú.

    Me he graduado con el mejor promedio de mi clase, donde se corrobora que si estudias y amas lo que haces, y sin importar los obstáculos todo sale como se debe con enfoque y planificación.

    Mi primer empleo fue como asistente administrativo con mi padrastro, quien tenía un negocio de sillas de oficina y tapicería de muebles, allí aprendí desde como presentar un presupuesto a un cliente y vivir todo el proceso, -buscar las sillas, reparar las sillas, entregar las sillas, y presentar la factura, para cobrar-.

    Siempre me ha gustado estudiar, por tanto, no paso mucho tiempo para iniciar mis estudios profesionales, en vista de lo reducido de tiempo por atender a mis hijas, tenía que pensar en una forma de lograrlo dentro de los tiempos, es decir, que me permitiera adelantar mis estudios y cuidar de mis hijas que se encontraban en edad temprana.

    Alrededor del año 2002, se me ocurrió hacer un contrato con mi padrastro, yo era su asistente administrativo, y el salario seria la cuota de la universidad, y así fue, busqué quien cuidara de mis hijas, por tanto, trabajaba de día y estudiaba de noche, y terminé graduándome de T.S.U en Administración de Empresas. 

    A lo largo del tiempo me he desempeñado desde Asistente Contable/Administrativo a Gerente de Operaciones; realizando actividades como: Registro de facturas en sistema Galac, Emisión de Reportes Contables tales como: Balances de Comprobación, Balance General, Estado de Ganancias y Pérdidas, Elaboración de Balances Reexpresados, Flujo de Caja, REME, Elaboración de Planillas de ISLR-IVA, Cobranza, Registro en Servicio Nacional de Contratistas, Registro/control/liquidación de Préstamos a los trabajadores.

    Luego de ello, decidí cambiar de ambiente y con todo lo aprendido, me quise aventurar como vendedor de Stanhome Venezuela, en el cual pude desarrollar una carrera administrativa y desempeñé actividades desde Supervisor de Zona, lo cual me permitió conocer cómo se bregaba la calle.

    Fue allí en Stanhome Venezuela donde comprendí lo que era obtener todo mediante el dinero generado, era un sistema de compensación bajo demanda, donde se ganaba en función de lo cobrado, claro ejemplo que me enseño el valor del enfoque, planificación, y que todo esfuerzo tiene su fruto.

Durante el año 2006 fue súper divertido, muchísimas actividades, aprendí a como impulsar a las personas, mostrándoles una oportunidad de negocio que te permitiría generar ingresos extras, desde cualquier parte, y sin dejar tu trabajo habitual.

Fue con ello que obtuve mi primer vuelo internacional, viajando a España y luego a diferentes partes del mundo, haciéndome así una persona resilente y comprendiendo claramente que todo en la vida es mediante esfuerzo, constancia y determinación.

    Ya entrando en mi adultez ingresé a e-business corporations C.A, una de las empresas más sólidas del país donde se imparten clases de formación e implementación SAP; presté servicios de coordinador de calidad de procesos y auditoría realizando actividades como: elaboración de indicadores de gestión, gestión y control de proyectos, elaboración y seguimiento presupuesto, flujo de efectivo, elaboración de ISLR/IVA/patente y de coordinador de educación y logística realizando actividades  quorum de equipos, recepción/entrega de refrigerios, control de costos de eventos, supervisión de cumplimiento de fechas.

    Me mantuve en dicha empresa 13 años de servicio lo cual afianzó lo que efectivamente estudié y descubrí el corazón del cómo se crea un negocio, y el cómo los procesos generan modelos de negocios exitosos.

    En la actualidad me desempeño como auditor de procesos, siendo agente de cambio, donde pretendo sensibilizar que los procesos administrativos bajo la economía disruptiva que vivimos son los guías perfectos para obtener los resultados deseados, comprendiendo los pro y contras de situaciones contribuyendo hacia la correcta toma de decisiones.